viernes, 12 de abril de 2013

Domingo por el Valle, con castillo, cerro, viñedo y hasta RÍO¡¡.



Amanecía una mañana soleada en Dosbarrios, aunque engañoso este sol, puesto que la temperatura no llegaba a los 10ºC. Esa mañana comenzó con gran alegría para los bikers allí concentrados, debido a que nos reunimos alrededor de una quincena de ruteros en la Plaza, consolidada ésta ya como punto de partida de nuestras rutas. Allí decidimos bajar por el Pilar Nuevo, para tomar rumbo hacia Huerta. 


Cuando acabábamos de pasar el Pilar Nuevo, contemplamos a nuestra izquierda una cuesta, que llevaba varios días llamándonos la atención, y que alguno de nuestros compañeros había subido anteriormente, y como no de cabeza que fuimos para allá, todos la coronamos aunque lo malo de esta subida fue la retirada del grupo de uno de nuestros compañeros, debido a la rotura de su cambio, y que una vez coronada, decidió volver al pueblo.




De nuevo, como ya ocurrió el sábado, apareció Pablo en escena liderando al grupo, ya que queríamos bajar de nuevo al Valle por Valdecaleras, y el camino por el que se debería pasar estaba cortado, así que Pablo a la cabeza, y a dirigir al grupo por una vereda, la cual tuvimos que bajar una mitad andando debido a que era imposible descender por ella montados en nuestras bicis. Obviamente después se le dijo a Pablo, algunos más en broma que otros, ¡¡que no volvía a comandar el grupo!!. Como se dice por nuestra zona: "Ojo el juego que da este muchacho".

Una vez todos en el camino dirección de nuevo a Huerta, cuando no llevábamos más de un kilómetro rodando desde la bajada de la vereda, de repente, "PUM" , el camino cortado (de nuevo), esta vez se trataba de una puerta que impedía el paso a nuestro pelotón. Así que hubo que saltarla, o al menos eso hicieron Oscar, Alejandro y Ángel (con enganchón de su bici incluido), hasta que David la consiguió abrir, de nuevo reanudamos la marcha, y de nuevo a los pocos metros tuvimos que abrir otra puerta que estaba al final del viñedo, por el que transcurría el camino que seguían nuestros bikers.


Y aquí es cuando se avisó a Alejandro para que se adelantara al grupo, ya que en unos metros, se encontrarían con un arroyo, en el cual se podrían tomar unas fotos del grupo cruzando éste, y estarían muy “chulas ” para subirlas a nuestras redes sociales.
Pero cual fue la sorpresa de los bikers, cuando no se encontraron un arroyo sino un RÍO, provocado por las lluvias de los anteriores días. Aunque esto no fue ningún impedimento para que los VALIENTES del Club lo cruzaran, es decir David, Oscar, Pablo y Alejandro, debido a que Rosario, que se conoce todas, sabía que al lado había un puente hecho con maderos, por el cual cruzaron el resto de bikers, menos intrépidos y atrevidos que los cuatro bikers antes mencionados, y que temían mojar sus pies y rodillas.











En las anteriores fotos se puede ver a los VALIENTES que lo cruzaron.
















Y aquí a los que les dio miedo el agua!!


Finalmente y una vez pasado este río, parecía que ya llegaríamos a Huerta, pero cuando íbamos bajando por el camino principal, de nuevo fuimos deslumbrados por otra cuesta que no podíamos dejar sin subir, y no nos falló, una gran cuesta,  larga, con una gran inclinación en sus 100 metros finales, y que todos escalamos subidos en nuestras monturas, seguidamente, y tras haber tenido que llevar la ruta por linderos, hasta encontrar una bajada que habíamos visto mientras ascendíamos la empinada cuesta dejada atrás por el grupo. Se trató de una bajada muy divertida para todos; rápida, con piedras sueltas y baches para ser saltados. Una vez finalizada la bajada rodamos un par de kilómetros, hasta llegar a Huerta,  donde subimos al Castillo de dicha localidad, no sin antes cruzarnos con un grupo de ciclistas, y de crear la expectación en los vecinos de esta localidad, los cuales dudaban de nuestra pericia y fondo físico para esta subida. Una vez todos en la cumbre nos tomamos nuestros plátanos, barritas, chocolatinas, etc. Obviamente, no sin antes sufrir en los grandes porcentajes de subida de dicho castillo.




Javi y Dani terminando de subir al Castillo de Huerta.


Una vez repuestas las fuerzas, decidimos tomar rumbo hacia la carretera que nos llevaría a Dosbarrios, debido a que muchos de nuestros componentes, querían llegar más temprano al pueblo. Pero lo gracioso fue cuando Oscar, que  lideraba el grupo, se metió por una calle estrecha y con pavimento de cemento, en la que de repente nos encontramos a nuestro paso nada más y nada menos que UNA CHIMENEA que salía del suelo, y seguidamente una señora diciendo: ¡¡Pero donde vais por aquí, que aquí no se puede pasar!! Todo esto ante el asombro de los que íbamos en el grupo, obviamente se engañó con la procedencia del grupo a la señora, para así no crearnos mala fama y crear de paso las risas en el grupo.



Finalmente, subimos a Dosbarrios, realizando incluso filas de relevos en las zonas llanas , para así poder hacer más fácil el rodaje. Y por su puesto para culminar con el día de Mtb, nos tomandos unos refrescos y "cervecitas" en la Plaza.


Hasta aquí el relato de este fin de semana de Mtb, espero que os haya gustado. Saludos a todos, y si nos leéis pero no salís con la bici, animaros que veréis como disfrutaréis de un buen ambiente y además mejoraréis vuestra forma física.


¡¡Hasta la proxima!!

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